EDITORIAL

La gran noticia conocida en los últimos días, referida a la obtención del SNED, debe ser vista como una señal de que el trabajo mancomunado entre docentes, sostenedores y directivos es posible, sobre la base del respeto y el reconocimiento a los trabajadores. Un colegio que quiere llegar a ser grande debe trazar un proyecto educativo democrático e igualitario, sobre la base de la consecuencia, y eso es precisamente lo que ha primado en la labor de directivos, docentes, paradocentes, inspectores, auxiliares y estudiantes.
Es de esperar que esto se vaya afianzando, pues el diálogo y el entendimiento tienen frutos, uno de éstos la obtención del logro recientemente adquirido.